¿Nombrados por espíritu santo?

La organización de los Testigos de Jehová enseña que los que llevan la delantera, sean estos superintendentes, ancianos o siervos ministeriales son nombrados gracias o bajo la guía del espíritu santo.
Sin embargo, esto queda en entre dicho cuando dichas personas se les asigna un cargo de responsabilidad mientras practican pecados graves, incluso delictivos.


Según la organización, así se produce un nombramiento:
"Bajo la dirección del Cuerpo Gobernante, estos varones son nombrados ancianos o siervos ministeriales (1 Tim. 3:1-9, 12, 13). Por eso, de todos los que cumplen los requisitos bíblicos puede decirse que han sido nombrados por espíritu santo" (bt cap. 5 págs. 42-43 párr. 20 “Tenemos que obedecer a Dios como gobernante”).

"Cuando se remiten a una sucursal de la Sociedad Watch Tower las recomendaciones de superintendentes y siervos ministeriales, hombres experimentados buscan la guía del espíritu de Dios para hacer los nombramientos. Tales cristianos sienten la responsabilidad que ello implica, pues se dan cuenta de que no deben imponer las manos apresuradamente a ningún hombre, no sea que se hagan partícipes de sus pecados" (Atalaya 2001, 15 de enero páginas 15-16).

"Los superintendentes viajantes envían informes a la sucursal. Con la ayuda del espíritu santo y las Escrituras inspiradas participan con los ancianos locales en recomendar a hermanos que llenen los requisitos para ser nombrados por el Cuerpo Gobernante o sus representantes como siervos ministeriales y ancianos".(Atalaya 1990, 150 de marzo página 20).

"Las recomendaciones y los nombramientos se hacen después de orar y bajo la guía del espíritu santo. Además, los varones nombrados evidencian en su vida el fruto de dicho espíritu" (w02 15/3 pág. 14 párr. 7 Cristo dirige a su congregación).

Hay que tener en cuenta otro punto más, la organización afirma..."nuestro Caudillo designa a hombres cualificados, ungidos o no, para que sirvan de ancianos en las congregaciones. A este respecto, es importantísimo el papel que desempeña el espíritu santo, que Jesús emplea por la autoridad que ha recibido de Jehová".

Entonces, ¿Puede una persona que practique el pecado en secreto gozar de responsabilidades frente a la congregación?. La Atalaya del 15 de marzo de 1972 página 181 dice "los requisitos que se dan en las Escrituras muestran que los que son siervos ministeriales deben ser ejemplares en su vida privada y en sus relaciones con otros. Por eso, antes que a cualquiera se le recomiende al cuerpo gobernante para ser nombrado siervo ministerial se debe dar consideración cuidadosa a cada uno de esos requisitos bíblicos; ninguno debe ser pasado por alto ni tratado como de poca importancia".

A pesar de lo ante dicho, la Atalaya del 15 de marzo de 2014 página 3-8 que se estudió esta semana, nos sorprendió con este comentario "Un hermano comenzó a ver pornografía cuando tenía 12 años y siguió haciéndolo a escondidas durante más de 10 años. Cuenta que le costó decírselo a su esposa y a los ancianos. Pero cuando por fin lo hizo, sintió que le quitaban un gran peso de encima. Reconoce que decepcionó a algunos de sus amigos cuando dejó de ser siervo ministerial". La sociedad Watchtower reconoce que su nombramiento ocurre mientras practicaba el pecado en secreto. Veamos otro ejemplo.

Hace poco hemos sabido que Gonzalo Campos, un anciano de congregación, admitió el abuso de menores. Estos abusos fueron perpetrados desde principio de la década de 1980 hasta mediados de 1990.
Gonzalo Campos gozó de ciertas responsabilidades durante esos años, primero como siervo ministerial y luego como anciano.
Aprovechó su condición privilegiada para abusar de los menores, incluso con un niño de seis años a quien le conducía un estudio de la biblia.
La primera acusación surge en el año 1982 por abusar sexualmente de un niño de 12 años mientras dormía, aunque Campos admitió los hechos, el cuerpo de ancianos solo "reprendió" verbalmente al abusador sin mayor castigo.
En 1986 Campos es nuevamente acusado de abusar sexualmente de un  menor, en esta ocasión el comité judicial le censura privadamente.
En 1988 Campos fue nombrado siervo ministerial, ese mismo año había comenzado a abusar de un niño de 6 años.
En 1993 es nombrado Anciano y secretario de congregación.
En 1994 Campos abusa de otro joven.

Nuevamente vemos como este nombramiento surge en el transcurso en el que se cometen pecados graves. Algo que contradice lo que enseña la organización: "Para la protección de nuestros hijos, un hombre que haya abusado de menores no llena los requisitos para ocupar una posición de responsabilidad en la congregación"
(Atalaya 1 de enero de 1997 página 29).

¿Podemos dudar acaso de que los nombramientos son bajo la dirección del espíritu santo como enseña la organización? Tomando como ejemplo estos dos casos podemos ver que algo falla o que Dios y el espíritu nada tienen que ver en este asunto.
Tal vez sea el motivo por el que la organización ha decidido ahora que los nombramientos sean responsabilidad de los superintendentes viajantes y no del cuerpo gobernante.

*Para ver el caso de Gonzalo campos haga clic en el nombre coloreado en azul o aquí.